lunes, 11 de abril de 2011

LA VERDAD QUE PICA "PASARELAS...EL BAILE DE TONGOLELE"





Hola mis Carmelas y Carmelos:
¡Cómo pasa el tiempo! Y no es que yo esté viejo, pero tenía 3 años desde que hice mi último artículo “La verdad que pica” en los blogs de belleza. Ahora mis amigos <los missiólogos> me invitaron a que cada cierto tiempo les comparta mi opinión, como saben son más de 20 años viendo, viviendo, respirando y compartiendo lo que se vive en los concursos de belleza, principalmente en el Miss Universo.
Se habrán enterado que tengo nuevo hogar, me mudé hace año y medio a un país que me encanta: Panamá. Lastimosamente las cosas en mi querido Venezuela no andan bien en nada, tanto así que tendremos nueva clasificada en Miss Universo con apariencia de una mujer de 35 años.
Pero a lo que vine fue a hablar de las pasarelas. Mi motivación con este tema me la dio lo que vi hace una semana exactamente en el Concejo de las Misses panameñas.

Pasarelas…el baile de Tongolele
Todos estamos claros que los concursos de belleza tienen como objetivo elegir una o varias representantes para los concursos nacionales e internacionales de señoritas y la cualificación para estos concursos es relativamente exigente. Se pide, de una parte, que las candidatas tengan una agradable presentación física, lo que importa una estatura de promedio no menor a 1.70 metros, medidas aproximadas al 90-60-90, un rostro bello y una buena cultura general así como un buen desenvolvimiento frente al público y grupos. Así mismo, cuando el evento es grande y hay un buen número de candidatas se toma en cuenta data  la personalidad de la candidata y su desenvolvimiento agradable hacia los demás, lo que es comúnmente conocido como “simpatía”. Así mismo se toma muy en cuenta en estos eventos a las candidatas que tienen mayores cualidades para posar ante las fotografías, lo que se conoce comúnmente como señoritas “fotogénicas”. En fin, ser candidata para uno de estos concursos de mayor o menor envergadura es una fuente inagotable de experiencia para cualquier modelo y la oportunidad de un reconocimiento rápido en el medio si la candidata gana el concurso y en el evento no hay algo arreglado de antemano.
Como en todo concurso, las competencias son pautadas por una organización, pero son las competidoras las que asumen el estilo de competencia. Es ahí, conscientes ellas de sus habilidades, destrezas y cualidades físicas, cuando nacen los estilos para llamar la atención de los jueces y público en general.
En Venezuela, máximo país ganador de concursos de belleza en el mundo, nace en 1985 un estilo particular que desarrolló quien representaba al departamento de Vargas, Giselle Reyes. Es un calculado movimiento de muñecas, brazos, manteniendo control de hombros, con un fuerte o delicado (dependiendo si se trata de traje de baño o noche) contoneo de caderas. Las piernas se cruzan en el caminar tal cual modelos de desfile de diseñadores famosos.
Ese peculiar estilo que ha sido parte de cada triunfo venezolano se ha intentado copiar alrededor del mundo. Y Panamá no escapa de ello, lo que no veo mal. Si las copias son genuinas que se hagan, pero si son barateces se va a notar.
Precisamente eso fue lo que vi de algunas candidatas de Miss Panamá 2011. Aclaro que aun no defino mi favorita a la corona, aunque tengo claro que hay dos que me gustan mucho.
En el público era evidente el favoritismo hacia tres candidatas Sheldry Sáez representante de la provincia de Herrera, Irene Núñez de Veraguas y Keity Mendieta de Panamá Centro.
La pasarela de Sheldry Sáez lució sencilla, a veces fuerte y a veces débil. Su mejor ejecución fue en traje de noche.  Detrás de mí había un fanático de una de las misses que se atrevió a gritarle, en el momento en que se le complicó la cola con el tacón: lizaaaaa! Con la peculiar entonación de “loca carnavalera”. Después me enteré que se trataba del manejador de una de las chicas que más adelante destacaré.
De no ser por ese pequeño tropiezo y de los innecesarios movimientos de boca, la pasarela de Sheldry Sáez hubiese sido perfecta. Lo que demuestra que debe ensayar, ensayar y ensayar hasta la noche final. Si logra una pasarela como se espera, pueden dejar claro que la corona a Miss Universo debe ser de ella.
Imitando la técnica que usan las venezolanas y que arriba describía, llegó Keity Mendieta e Irene Núñez.
Mendieta, que se pasó tomando clases 1, 2 y tres de Verushka Ramírez con énfasis en Dayana Mendoza, estaba controlada, excepto por el efecto que produjo en su cabello el caminar en puntillas. Si las extensiones no estuvieran bien amarradas pudieron caérsele en escena, y peor aún cuando llegó en traje de baño a la punta de la pasarela. Empezó a mover el pelo tanto que Gloria Trevi en sus años mozos se le quedó corta.  Eso le encanta a las locas, quienes no paraban de gritar: ¡beeechaaa!, ¡esa es! ¡Regiaaaaa! ¿Y saben qué? Ni se veía bella, ni esa era, ni estaba regia. El daño que les hacen a esas chicas por darle ese tipo de consejo de concurso de travesti es enorme. Puedo apostar que gracias a eso, el nombre de Keity Mendieta no fue uno de los más votados por las misses del concejo, a pesar de ser una de las más bellas. EL 26 de mayo cuando rindan informe de lo que pasó esa noche me darán la razón.
Y que es lo que quiere el neeeeegro? Llegó Tongolele
¿Pero qué es esto? Me decía yo, al momento en que escuchaba el mismo tipo de alabanzas que le habían hecho a Mendieta pero ahora a la Núñez.
Yo no sabía si era una exhibición de “passa passa” (vaya bailecito feo que sacaron mis queridos panameños), de Joropo Venezolano, de Lambada o de Sopa de Caracol. Lo más certero que creo encontré para comparar fue un video de Tongolele, la afamada y escultural mujer de los años dorados del cabaret mexicano.
No puedo negar que ella posee unos ojos hermosos, que tiene un cuerpo que más de 4 quisieran tener en ese concurso, que tiene un color de piel fantástico que contraste con su cabello pero ¿Cómo pueden decir que Núñez posee la mejor proyección si su pasarela fue terriblemente vulgar? Y estoy convencido que eso no era lo que ella quería proyectar, pero que más de una loquita entrenadora es lo que le dice que está “regio.”
Tienen que mejorar esa pasarela, tienen que mejorar esos caminados. Dejen de copiar estilos y busquen su toque personal sin caer en lo ridículo. Y si se va a copiar, no caigan en barateces.
Si les gustó mi opinión, chévere! Y si no, abajo tienen un espacio para que me maldigan y me manden a hacer arepas de carne mechada.
Glanco Nolanco.



1 comentario:

  1. totalmente en lo cierto la pasarela totalmente anodina,vulgar y los peinados mal hechos ,y los disque fanaticos enganandolas a las pobres no dude que haya mujeres sobresalientes pero si siguen endiosandolas sin coronas van a quedar superpegadas !!

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